El juego del amor

Todos, a través de nuestra vida, nos hemos sentado alrededor de una mesa, una noche, o quizás una tarde a jugar un juego de mesa; ya sea Monopolio, Clue, Ajedrez, Pictionary, Taboo, etc.

Lo primero que hacemos cuando abrimos el juego, si es que nunca lo hemos jugado es ver las instrucciones y leer grosso modo las mismas, y a partir de esa base empezar.

Si surge alguna duda durante el desarrollo del juego lo que hacemos simplemente es remitirnos a las instrucciones las cuales, nos damos cuenta, en ese momento, que no las leímos tan bien – o quizás no nos imaginamos todas las posibilidades- y por lo tanto es necesario una segunda leída, un poco más detenida y con la experiencia de lo jugado en mente para cualquier otra interrogante.

Si esto ya nos ha pasado antes, podemos admitir que al leer las instrucciones por segunda vez nos damos cuenta de muchos otros detalles, ya que esta segunda lectura es acompañada de la experiencia por ya haber jugado un poco del juego, y por lo tanto al leerlo uno piensa “ah! Esto es así!”, y entonces las cosas empiezan a tener mucho más sentido.

Ahora imaginemos que estamos jugando un juego, que ¡no viene con instrucciones!, pero nos han contado como es el juego, nos han llegado historias, leyendas, mentiras, verdades, paradigmas, mitos y a partir de todo estos datos nosotros construimos nuestra propia instrucción.

El juego se llama “LA BUSQUEDA DEL AMOR”, y consiste en un camino que puede ser largo o corto- depende de ti- y cuyo fin es conseguir la relación deseada (no me quiero meter al juego del “AMOR ETERNO”- cuyo fin es llegar a durar como relación por siempre- ya que ese juego es de otro lote: nivel de dificultad casi inalcanzable por inexpertos).

“La búsqueda del amor” es quizás el juego de mesa más difícil de jugar ya que existen factores determinantes que afectan el desarrollo de éste, diferenciándose de los demás juegos de mesa en puntos como los siguientes:

1) Es totalmente comprensible que los participantes se piquen- dicese de quien no aguanta perder y parece volverse loco e incontrolable- e inclusive lleguen a pelearse;

2) Las piezas que le corresponda a cada jugar es relevante para ver como te irá en el juego, ya que ficha fea es igual a nivel de dificultad alto, mientras que ficha bonita es igual a nivel de dificultad bajo en el juego;

3) Como dije antes, el juego no tiene un tiempo de duración definido o estimado, ya que para algunos puede ser muy corto, mientras que para otros el juego, hasta hoy día, no termina;

4) En vez de usar dados, los participantes usan palabras, acciones, estrategias, o regalos, y dependiendo de la respuesta de quien quieres conquistar se determina si avanzas o retrocedes;

5) En este juego hay tarjetas de preguntas que se van sacando a mitad del camino, pero estas no están predefinidas, a quien buscas conquistar te puede preguntar cosas que te dejan en aprietos- cuenta la leyenda que inclusive hay preguntas que no tienen respuesta correcta-;

6) Si hay un contrincante adelante tuyo no lo puedes simplemente saltar si sacas un número mayor, ya que todo lo actuado en el juego, las acciones o comentarios realizados en ese momento y el aspecto que tenga tu ficha serán CLAVES para determinar si a quien quieres conquistar te otorga el derecho de pase por encima del contrincante;

7) A veces tienes que adivinar (sin indicios) las cosas que a quien quieres conquistar quiere- a diferencia de Clue que por lo menos te dan pistas para descubrir al asesino- y cualquier error será usado en tu contra, porque ella creerá que era totalmente obvio lo que quería;

8) En este juego se utiliza también el dinero- con el fin de conquistarla con una cita, un regalito o un detalle- pero el juego no viene con papeles de dinero, en este juego…juegas con dinero real;

Los puntos son interminables, pero creo haber dejado clara la idea de que estamos ante un juego muy difícil; repito: muy difícil.

Entonces, si jugamos un juego como éste, donde no existen instrucciones, y empezamos jugando de cero, ¿se imaginan cuantas veces nos equivocaremos y tendremos que volver a empezar?

Llegarán momentos en los que volveremos a la partida y releeremos lo que escribimos a través del tiempo, haremos un par de correcciones y volveremos a empezar, porque si en un juego con instrucciones, terminamos leyendo por segunda y a veces hasta por tercera vez las instrucciones para recién jugarlo bien, ¿te imaginas cómo es en el amor?

A lo que quiero llegar, para concluir este artículo, es que el amor, o la búsqueda de éste, es un juego donde no hay que frustrarnos si nos regresan a la partida varias veces. Sólo volvamos a leer las instrucciones que anotamos gracias a la experiencia en el juego, y tengamos un poco de fe que siempre nos irá mejor.